martes, 25 de septiembre de 2012

Día 4. MIEDO A VIVIR SOLA



Vivo en casa de mis padres, con mi Mamá, Papá y tres hermanos. Desde hace unos años adquirí una pequeña casa y a la fecha la tengo casi totalmente amueblada, con la finalidad de irme a vivir ahí yo sola, sin embargo no he podido hacerlo ya que tengo resistencia a  mudarme. Lo principal es que siento miedo de estar sola en mi casa, sobre todo por las noches, aunque puede ser a cualquier hora del día, y el temor que siento es por ejemplo a que al abrir la puerta alguien este adentro aguardando a que yo entre para  hacerme daño, o que ya una vez estando yo adentro salga alguien de debajo de la cama, del closet o de cualquier lugar en el que pueda esconderse, para agredirme, o que alguien entre y me ataque. Una vez dentro de la casa, al deambular siento como si de repente alguien me llega por la espalda para atacarme. Igualmente cuando me estoy bañando y cierro los ojos para lavar y enjuagar mi cabello tengo la sensación de que alguien se haya introducido a la casa a pesar de haber cerrado con seguro todas las puertas, y repentinamente irrumpa en el baño, así que rápidamente quiero abrir los ojos para asegurarme que no sea así.

Me perdono a mi misma por haberme permitido y aceptado a mi misma tener miedo a estar sola en mi casa, pensando/imaginando que soy atacada dentro de ella.
En el momento y cuando me vea a mi misma imaginando que alguien se introduce a mi casa para hacerme daño, me detengo y respiro. Me doy cuenta que eso es solo la mente como yo misma queriendo poseerme para continuar apoderada de mi, en lugar de tomar yo misma mi espacio y plantarme como la dirección que soy como Vida. Me comprometo a mi misma a detener los pensamientos de ataque y llevar a cabo mi mudanza para continuar con mi proceso de realización de uno mismo.

Me perdono a misma por haberme permitido y aceptado a mi misma proyectar en mi exterior el ataque que permito dentro como pensamientos y emociones.
En el momento y cuando me vea a mi misma permitiendo pensamientos y emociones de ataque, me detengo y respiro. Me doy cuenta que es la proyección al exterior de lo mismo que permito dentro de mí como pensamientos y emociones, en lugar de frenar ese ataque a mi misma y convertirme en la Vida. Me comprometo a mi misma a no proyectar ese ataque pero también a no permitir el ataque dentro de mi misma como pensamientos y emociones.

Me perdono a mi misma por haberme permitido y aceptado a mi misma que el miedo me posea, en lugar de respirar y explorar cada momento como Vida.
En el momento y cuando me vea a mi misma siendo poseída por el miedo a estar sola en mi casa, me detengo y respiro. Me doy cuenta que el miedo únicamente me frena en mi camino de siete años a la nada. Me comprometo a respirar y explorar cada momento como Vida.

Me perdono a mi misma por haberme permitido y aceptado a mi misma almacenar información en mi mente sobre películas, noticias y pláticas acerca de ataques y daños a las personas en sus casas y así al aceptar y permitir estos pensamientos y emociones dentro de mi no me doy cuenta que estoy creando separación de mi misma y de toda la existencia como Vida.
En el momento y cuando me vea a mi misma participando en información de ataques y daños a personas en sus casas y al mismo tiempo reteniéndola, me detengo y respiro. Me doy cuenta que eso me lleva a crear separación de mi misma y de toda la existencia como Vida. Me comprometo a no participar ni almacenar en mi mente información de ataques, ni a permitir pensamientos ni emociones dentro de mí.

domingo, 23 de septiembre de 2012

Dia Tres. NO PODER COMENZAR A ESCRIBIR




Cada día, antes de comenzar a escribirme tengo uno o más temas que quiero desarrollar, pero al estar  ya sea frente a la computadora o frente a la libreta e intentar comenzar a escribir, me bloqueo y no me vienen o fluyen las ideas, me disperso y pospongo el comenzar. En ocasiones tengo la idea pero no puedo organizarla de tal manera que pueda plasmarla en la escritura y me distraigo con cualquier cosa, entonces me  tomo un momento para poder organizarme o despejarme, lo dejo para luego u otro día e igual batallo para escribir.
Me perdono a mi misma por haber permitido y aceptado a mi misma el hecho de que cuando voy a escribir mi día, tienen que venir hacia mi o fluirme las ideas para desarrollar, en lugar de dirigirme a mi misma y simplemente escribir y plasmar lo que decidí dejar en claro.
En el momento y cuando me vea a mi misma esperando a que me vengan o fluyan ideas para escribir, me detengo y respiro. Me doy cuenta que mi participación en esa espera únicamente detiene mi caminar y no me permite avanzar.
Me comprometo a mi misma a dirigirme a escribir los aspectos relevantes de mi vida y a crearme el hábito de escribirme como parte de mi rutina diaria. Asimismo, me comprometo a mi misma a estar atenta a los pensamientos que tengo y llevarlos a la escritura en algún momento del día y así caminar el perdón a mi misma por no poder comenzar a escribir.

Me perdono a mi misma por haberme permitido y aceptado a mi misma distraerme con cualquier otra cosa/asunto que me aleje de la escritura, en lugar de enfocar mi atención hacia lo que me he propuesto desarrollar.
En el momento y cuando me vea a mi misma distraerme con cualquier otra cosa/asunto que me separe de la escritura, me detengo y respiro. Me doy cuenta que al participar de la distracción me transporto a un estado de relajación e inactividad al cual me he adaptado y me siento cómoda en el, pero eso me lleva a retrasar mi objetivo y a no cumplir con mi trabajo y por lo mismo a sentirme más presionada por no realizar mi tarea.
Me comprometo a mi misma a no participar de las distracciones, y que cuando estas quieran irrumpir inmediatamente detenerlas y continuar con mi trabajo de escritura porque es lo que realmente quiero hacer, escribirme para liberarme.